jueves, 1 de noviembre de 2007

Autoentrenamiento

No creo que sea necesario explicar a lo que me refiero con autoentrenamiento pero, para los que no están en el mundillo, diré que es muy típico el ver gente que copia entrenamientos de otras personas, planificaciones, formas de hacer los ejercicios, etc., todo lo que tenga que ver con la metodología.

Un entrenamiento no es una receta. Pondré el ejemplo de quién va al médico a que le recete algo para determinadas molestias y el amigo, con dolores aparentemente similares, decide tomar lo mismo. Al final, uno tenía gases y el otro, cáncer... Es un ejemplo extremo, pero la realidad es ésta. Lo que es bueno para mí es este momento y con estos objetivos no tiene que ser igual para otro. Sólo un profesional cualificado sabrá valorarlo. Por supuesto que a todos nos gusta entrenar acompañados, pero siempre con criterio profesional.

Sin la supervisión adecuada en la realización de las sesiones, nunca se logran todos los objetivos. Como entrenador siempre tengo que hacer modificaciones y adaptaciones a la realidad diaria que, si no estuviese presente como conocedor de los objetivos concretos de esa persona, lo que el opositor interpreta y ejecuta provocaría un efecto no buscado en su organismo respecto del rendimiento y también de la salud. Aclararé que, incluso estando presente, me puedo equivocar, pero la información que recabo con la observación es muy útil para las siguientes sesiones.

Recordaré lo que advertía en el post sobre entrenamiento concurrente acerca de que creo que los técnicos deportivos están cualificados sólo para los deportes o actividades para las que se formaron, lo que no tiene nada que ver con entrenar opositores. Para reflexionar un poco acerca de esto, me gustaría recurrir a una pirámide del saber que me enseñaron en un curso:
:
Capacidad inconsciente
Consciente de mi capacidad
Consciente de mi incapacidad
Inconsciente de mi incapacidad
:
Habrá quien dirá: "pues a mí me ha funcionado tal entrenamiento". No lo dudo. También puedes bajar a la calle saltando directamente por la ventana o tomando el ascensor. El problema está en el tiempo y el esfuerzo malgastados y que muchas lesiones pasan factura con el paso de los años...